Derechos y deberes del paciente

Al derecho y al deber, un compromiso de doble vía:

Derechos

1.  Elegir los profesionales de la salud que participan en su proceso de atención teniendo
presente los recursos disponibles en la institución.
2.  A ser informado de forma clara y completa de todo lo relativo a su enfermedad,
procedimientos, tratamientos y los riesgos que se pueden presentar durante su proceso
de atención, además, a que todos los informes de la historia clínica sean tratados de
manera confidencial, salvo por exigencias legales que lo hagan imprescindible.
3.  A recibir un trato digno, respetando sus creencias y costumbres, así como las opiniones
personales sobre la enfermedad que padece.
4.  Derecho a revisar y recibir las explicaciones acerca de los costos por los servicios
obtenidos.
5.  A que se le garantice las condiciones para una muerte digna, estar en compañía de su
familia y que se le respete la voluntad de no donar sus órganos y tejidos para que sean
trasplantados a otros pacientes, dado que la ley 1805 de 2016 convierte a todos los
colombianos en donantes.
6.  A participar en la Asociación de Usuarios, a ser escuchados y obtener respuestas a sus
reclamos e inquietudes.
7.  A recibir los servicios de salud en condiciones de habitabilidad, higiene, seguridad y
respeto de su intimidad.
8.  A recibir o rechazar apoyo espiritual o moral y a que se le respete la voluntad de participar o no en investigaciones.

Deberes

1.  Acatar las instrucciones brindadas por el equipo de profesionales y respetar las normas de aislamiento, orden, limpieza y seguridad institucional.
2.  Brindar la información necesaria, clara y completa solicitada por el personal de salud
acerca de su estado clínico, además puede aceptar o rechazar por escrito los
procedimientos y tratamientos una vez le han informado los riesgos y complicaciones.
3.  Tratar con dignidad y respeto al personal que está a su servicio y respetar la intimidad de los demás usuarios.
4.  Facilitar el pago oportuno por la prestación del servicio así como cancelar las consultas y procedimientos programados cuando no pueda asistir.
5.  Informar al personal de salud las decisiones y deseos del paciente y la familia en caso de enfermedad terminal como no reanimación, medidas extraordinarios y el alta voluntaria.
6.  Utilizar los servicios de atención al usuario, con el fin de realizar de manera respetuosa sus quejas, reclamos, sugerencias y/o felicitaciones.
7.  Cuidar y hacer uso racional de los recursos, las instalaciones, la dotación y demás servicios que la Clínica Antioquia tiene a disponibles para usted.
8.  Procurar el cuidado integral de su salud y la de su familia, siendo parte activa del
tratamiento.

Política de Humanización de la Atención

La CLÍNICA ANTIOQUIA adquiere el compromiso de promover entre los empleados, una cultura de humanización en la atención, fundamentada en un trato digno, humano y respetuoso, con el fin de fortalecer la confianza en la atención, propiciando espacios donde el paciente, familiares y colaboradores, interactúen de manera incluyente como seres humanos.

Los principios que orientan todas las acciones a implementar en la política de humanización son:

Atención digna y respetuosa:

Articular los principios, valores, derechos y deberes del usuario, de manera que se conviertan en referentes para garantizar durante el proceso de atención, una calidez en el trato, respeto por la dignidad, privacidad y confidencialidad.

Servicio humano de calidad:

Trabajar en procesos articulados y centrados en los usuarios, no sólo desde el punto de vista de la estandarización, la tecnología y la seguridad, sino, en el fortalecimiento de elementos como la comunicación, la cultura organizacional y el trabajo en equipo. De tal manera que se garantice el desarrollo y mantenimiento de las competencias necesarias para los equipos asistenciales y administrativos, que participan directa o indirectamente en la prestación de los servicios de salud de la clínica.

Atención centrada en el usuario:

Reconocer que las inquietudes y preferencias del usuario también son válidas e importantes, entendiendo al paciente y su enfermedad, permitiéndole expresar todas las razones para su consulta. El personal debe entender las expectativas del paciente, sus sentimientos y sus temores, teniendo en cuenta que cada paciente que busca ayuda tiene alguna expectativa de la visita, y no necesariamente la hace explícita.